Aunque es un concepto que hemos escuchado en numerosas ocasiones, el Feng Shui es aún un gran desconocido en buena parte del país. Se trata de una filosofía que basa la orientación y distribución de los espacios para lograr armonía y una gran influencia positiva en nuestras vidas.
Distribuir el espacio, la clave para una vida organizada.
La idea detrás del Feng Shui en el fondo es la misma que todos los decoradores e interioristas impregnar a sus proyectos, y es que detrás de una adecuada organización del espacio, aportando energías positivas y armónicas de manera que los que la habitan sientan vitalidad y la casa les envuelva con energía positiva.
Lo cierto es que la explotación del concepto de Feng Shui en occidente se ha visto en más de una ocasión ensombrecido por un amarillismo que ha intentado ubicarlo dentro de las pseudofilosofías ya que al ser un elemento cualitativo y no cuantificable, se ha tendido a ver como una moda pasajera más a pesar de contar con miles de años de antiguedad y tener una base que sirve para todo tipo de habitáculos más allá de clases sociales o nivel adquisitivo.
Ahondando en la cuestión de la distribución del espacio, para el interiorismo es una base fundamental y comparte ciertos rangos con la filosofía comentada. Los errores en distribución nos saldrán caros en coste y comodidad, mientras que los aciertos revalorizan y multiplican exponencialmente los metros a disfrutar. De esta manera, para conseguir una buena distribución espacial se necesita, generalmente, ampliar el espacio visual.
Muchas veces los muros y columnas que soportan la casa pueden ser nuestras mejores aliadas y sin embargo en otras ocasiones pueden convertirse en todo lo contrario. Para ello se debe jugar con todo lo que esté a nuestro alrededor y sobre todo que la luz natural se maxifique a lo largo de todo el recorrido del hogar.
Aquí entra en juego la forma de vida que llevemos puesto que si nuestra intención es tener una vida dinámica en la que usemos poco la casa y por tanto podemos jugar con la decoración por encima del espacio a una persona hogareña que va a pasar mucho tiempo. Y a todo ello hay que sumar los metros cuadrados con que contamos y el número de personas que conviven con lo que cada proyecto es orgánico, que se desarrolla de una manera única e inimitable para compaginar estas virtudes espaciales con la vida de aquellos que comparten el hogar.
En qué consiste el Feng Shui
Según la propia filosofía, este equilibrio se lleva a cabo a través de cinco elementos básicos de la naturaleza: Madera, fuego, tierra, agua y metal. La idea es buscar las vibraciones positivas con cada elemento que haga referencia su toque interior. Además, se hace referencia a otras filosofías orientales relacionadas con el ying y el yang o las energía de las tierra.
En ese sentido hay una serie de elementos naturales que a priori no tendrían cabida en un hogar moderno. Sin embargo al pensarlo, tiene bastante lógica que el agua (fregadero, lavavajillas) y el fuego (horno, placa de inducción) se encuentren separados pero unidos en un mismo contexto, como el de las islas de cocina de Modulnova en el que incluso los extractores (viento) están ubicados de tal manera que apenas sean visibles pero que ayuden a extraer el humo que se genere.
También los elementos metálicos se suelen tener en cuenta como una gran fuente de concentración, disciplina y liderazgo. Es muy importante que cada estancia tenga al menos una función, por la cual cualquier invitado sepa sin conocer el hogar las funciones que daría a ese espacio.
En cuanto a dormitorios, hay dos recomendaciones a seguir: Conseguir la mayor cantidad de luz y a la vez permitir una cálida sensación de oscuridad. Las mesillas de noche son buenas para proteger ambos lados, se ha de mantener una sensibilidad similar.
Los espejos en el dormitorio suelen dificultar el sueño y se recomienda evitarlos, para eso se pueden dejar para el ropero.
El cabecero suele recomendarse lo más lejano posible de la puerta ya que genera sensaciones de seguridad y visión de la habitación cuanto más amplia sea la visibilidad que tengamos.
En exteriores, se recomienda utilizar la naturaleza para complementar, nunca que esta sea el leitmotiv ya que lo importante es que haya zonas espaciadas y en las que disfrutar del sol y la naturaleza sin exceso de distracciones.